La seguridad y salud ocupacional es un pilar fundamental para el desempeño sostenible de cualquier organización. Más allá de ser un requisito legal, contar con un Reglamento Interno de Seguridad y Salud en el Trabajo constituye una herramienta estratégica para proteger a los colaboradores, fortalecer la cultura preventiva y asegurar la continuidad operativa.
Marco legal y obligatoriedad:
En Ecuador, el Reglamento Interno de Seguridad y Salud en el Trabajo es de cumplimiento obligatorio para todas las empresas, según lo establecido en el Acuerdo Ministerial MDT-196 y en el Código del Trabajo. Este reglamento fija normas claras sobre la prevención de accidentes, enfermedades profesionales y responsabilidades compartidas entre empleador y trabajador.
Herramienta de gestión preventiva:
El reglamento no es un documento decorativo; es un instrumento de gestión que traduce la política de seguridad de la empresa en acciones concretas. Establece procedimientos para:
Al integrar estas directrices en la operación diaria, se minimizan incidentes y se crea un entorno de trabajo más seguro y eficiente.
Cultura de corresponsabilidad:
Un reglamento bien implementado fomenta la corresponsabilidad: cada trabajador entiende su rol en la prevención y cada líder asume la supervisión activa de su equipo. Esto no solo reduce riesgos, sino que genera confianza, compromiso y disciplina organizacional.
Beneficios empresariales:
Las organizaciones que aplican de manera rigurosa su Reglamento Interno de Seguridad y Salud obtienen beneficios tangibles como:
El Reglamento Interno de Seguridad y Salud en el Trabajo es mucho más que una exigencia legal: es una garantía de prevención, bienestar y sostenibilidad. En KONEGGUI acompañamos a las empresas en la elaboración, actualización e implementación de este reglamento, alineándose con la normativa vigente y las mejores prácticas internacionales.